Las autoridades del Poder Judicial de Neuquén le tomaron juramento a un perro, de raza labradoodle, que se desempeñará en el área Infanto Juvenil de esa dependencia.
El acto se llevó a cabo en el Salón de Usos Múltiples del gabinete pericial, donde Oreo -tal el nombre del animal- se presentó ante la funcionaria de turno. "Jura usted por la Patria desempeñar fielmente el cargo de perro de asistencia judicial con destino al área Infanto Juvenil del Gabinete de Psiquiatría y Psicología?", dijo la empleada, en medio de los aplusos de los presentes.
La incorporación del perro forma parte de un convenio firmado entre la provincia y el Ministerio Tutelar de Buenos Aires, que se basa en la participación de animales como recurso terapéutico para ayudar a niños y adolescentes que deban declarar en las entrevistas en cámara Gesell, como víctimas o testigos. Su guía será una psicóloga, quien le impartirá órdenes cuando haga su intervención en etapas presenciales y virtuales.
Oreo, llamado así por tener el pelaje de color negro, fue elegido a los dos meses de haber nacido ya que se trataba del cachorro más equilibrado de la manada. Alegre y amigable, aprendió y reforzó conductas positivas que puede implementar al interactuar con los menores.
