
La única certeza hasta el momento es que Roxana Mercedes Villagra, que tenía 41 años, llegó sin vida a la Clínica Calchaquí. Cuando fue entrevistado por la policía, su esposo aseguró que la mataron a balazos los delincuentes que habían entrado a robar durante la madrugada.
LA DECLARACIÓN
Walter Eduardo Sosa tiene 42 años y es prestamista. Dice que fueron de tres a cinco los ladrones que los sorprendieron y aclara que los disparos comenzaron cuando forcejeó con los intrusos. Sosa también aclaró que es prestamista y que guardaba en su casa gran cantidad de dinero que finalmente no fue sustraído.
La policía le secuestró el teléfono celular y ya se impulsó una investigación para determinar si es cierta la versión del hombre y si pudo haberse tratado de un femicidio. Serán claves la pericias que se están realizando en la escena del crimen.
DUDAS
El móvil del crimen aún no está definido. A los investigadores les llamó la atención que los delincuentes no hayan robado 300 mil pesos que había en la casa. Además, declaró el hijo de de 7 años de la víctima y reveló que en la semana habían recibido «visitas», aunque no pudo identificarlos.
La pareja se dedicaba a los préstamos personales y a la venta de electrodomésticos chicos, como cafeteras y jugueras, y utilizaba su casa como depósito. Cuando llegó la policía encontró el dinero arriba de la mesa.
También encontraron en el lugar dos vainas servidas calibre .22 y otras dos calibre .380. El fiscal Jorge Saizar, a cargo de la UFI 5 de Quilmes, ordenó que se secuestren los teléfonos celulares de la víctima y de su esposo para saber si recibieron algún tipo de amenaza recientemente.