
La empleada doméstica María Ninfa «Nina» Aquino, que trabajaba para el matrimonio Del Rio, asesinado en su casona de Vicente López, fue sobreseída definitivamente en la causa, en la que estaba imputada como «entregadora» del doble homicidio.
La decisión la tomó el juez de Garantías 1 de San Isidro, Ricardo Costa, a cargo el expediente que tiene como principal imputado a Martín Santiago Del Rio como presunto autor del doble homicidio de sus padres José Enrique Del Río (75) y María Mercedes Alonso (72).

Hugo López Carribero, abogado de Aquino, había solicitado en dos oportunidades que la mujer sea sobreseída.
LA RESOLUCIÓN COMPLETA
EL CASO
Del Rio padre y su esposa Alonso aparecieron asesinados -él de tres balazos y ella de uno- el pasado 25 de agosto en el interior de su automóvil en el garaje de su casona de la calle Melo 1101, de Vicente López.

Si bien la empleada «Nina» Aquino fue la primera detenida, el juez de la causa la liberó por falta de pruebas y el 7 de septiembre los fiscales detuvieron al hijo menor de los fallecidos, Martín, como supuesto autor de un doble parricidio.
MARTÍN DEL RÍO Y EL MÓVIL ECONÓMICO
En base a prueba fílmica, tecnológica y testimonial recopilada por la fiscalía, el juez Costa dictó la prisión preventiva de Del Rio como autor de un «doble homicidio calificado por alevosía, por el vínculo, por el uso de arma de fuego y por ser criminis causa» (matar para lograr la impunidad), delito que prevé como única pena la prisión perpetua.

Para los fiscales, el móvil fue económico y está vinculado a la frustrada operación inmobiliaria por la cual las víctimas pensaban que ese mismo día iban a mudarse a un lujoso departamento del barrio porteño de Núñez, valuado en más de un millón y medio de dólares, y que Del Río hijo nunca pudo concretar.


