
El ladrón había roto un vidrio para poder entrar en la vinoteca y lo primero que hizo fue ir a la caja registradora para agarrar el dinero de la recaudación. Pero, según información de elcordillerano.com.ar, no pudo resistir la tentación y se preparó unos tragos de fernet. Al parecer bebió demás y se quedó profundamente dormido en el piso del negocio.
Cuando despertó, ya estaban junto a él los policías que habían llegado gracias los llamados de los vecinos que habían escuchado ruidos extraños.
Los efectivos encontraron al delincuente abrazado a la botella y en completo estado de ebriedad. Después constataron que tenía antecedentes penales y por eso quedó detenido. El dinero que había sustraído fue recuperado.


