
El ataque ocurrió el 18 de abril de 2015 cuando Manuela Ponz salió con sus amigos y en el regreso a casa fue violada por el taxista Tito Franklin Escobar Ayllón. Tras cometer el crimen, el chofer escapó y se mantuvo prófugo durante ocho años. Este jueves finalmente comienza el juicio en su contra.
Las audiencias serán en el Tribunal Oral en lo Criminal N°28. Comenzarán justo seis meses antes de que se cumpla una década de la violación y serán a puertas cerradas por el tipo de delito cometido.
La joven, quien tenía 20 años cuando fue víctima del taxista, ahora tiene 29, se recibió de abogada en la Universidad de Buenos Aires, se mudó a Caleta Olivia, en Santa Cruz, es madre de dos hijos y es autora del libro «La mala víctima». Será la primera testigo en declarar y está previsto que lo haga alrededor de las 10 de la mañana.
OCHO AÑOS PRÓFUGO

Escobar Ayllón, quien ahora deberá enfrentarse a la Justicia, escapó tras cometer el crimen y se mantuvo prófugo en por ocho años en Bolivia, lugar donde nació, hasta que fue detenido en julio de 2023.
Durante este tiempo, la joven viajó hacia el país vecino para buscarlo e incluso llegó a dormir con un cuchillo debajo de la almohada por temor a que apareciera.
«Era muy estresante. Yo no sabía dónde estaba él y tampoco si él sabía dónde estaba yo…Llegué a dormir con un cuchillo debajo de la almohada», declaró la víctima en su momento.
EL HECHO
Fue la noche del 18 de abril de 2015 cuando Manuela, luego de irse del bar Mamita en Álvarez Thomas y Olleros, en Colegiales, se subió a un taxi y se quedó dormida luego de indicarle la dirección al chofer.

No obstante, el hombre se aprovechó de la situación, estacionó el auto, se fue al asiento de atrás, le quitó la bombacha y la violó. La joven gritó y le rogó que parara, pero Escobar Ayllon siguió de todas maneras y luego la abandonó en La Paternal.
La víctima, hacía poco vivía en la Ciudad de Buenos Aires, llamó a su mamá y juntas fueron a denunciar al chofer, quien escapó cuando se dio a conocer la denuncia.
Actualmente, de ser encontrado culpable, el hombre podría recibir una pena de entre 8 y 12 años de prisión.