Personal de la División Delitos Ambientales en conjunto con la Dirección General de Control Ambiental (DGCONTA) llevó a cabo una orden de allanamiento en un domicilio ubicado en la calle Arrotea al 600 en Flores tras una denuncia por la posible existencia de un criadero ilegal donde mantenían a los perros en malas condiciones socio ambientales para luego ser comercializados.
Una vez en el lugar, los oficiales tomaron contacto con la dueña de casa y su hijo quienes interiorizados del motivo del operativo permitieron el ingreso a la propiedad.
Durante el procedimiento fueron rescatados 57 ejemplares de la raza Caniche Toy entre adultos y cachorros, todos ellos hacinados en malas condiciones de higiene, carentes de agua, alimento y vacunación. Además, se secuestraron 10 jaulas y 5 bolsones de comida, que en adición a la cantidad de canes confirmaban la existencia de un criadero ilegal y toda la actividad ilícita detrás del mismo.
Tras realizar la consulta pertinente con la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), ordenó imputar a los responsables por infracción a la Ley 14.346 (Ley de Protección contra el Maltrato Animal), hacer un relevamiento de los ejemplares rescatados y entregarlos a una ONG para su reubicación e incautar, además de los elementos mencionados, el celular de la propietaria.