

Minutos antes de caer por un balcón del hotel Casa Sur de Palermo, Liam Payne: discutió con dos escorts por el pago de supuestos servicios sexuales; fue encontrado desmayado en el piso del ascensor; lo hicieron reaccionar y se sentó en la barra del lobby donde volvió a desmayarse; fue ayudado a subir a su habitación (que ya estaba destrozada) y lo dejaron solo.
El jefe de recepción del hotel relató ante la justicia, con lujos de detalles, las últimas horas del artista británico y aportó material probatorio como el chat de las mujeres supuestamente contratadas por Payne.
ViaSzeta pudo acceder al expediente donde se detallan las últimas horas del ex One Direction.
El jefe de recepción declaró:
EL INGRESO: “a Liam Payne lo esperábamos el lunes 14, pero finalmente ingresó el domingo 13 alrededor de las 23:14 horas. […] Liam se hospedó solo en el hotel, su manager solamente lo iba a buscar y lo esperaba en el lobby, lo acompañaba un rato en el bar, desconozco donde se hospedó su manager acá en Buenos Aires”.
ALCOHOL Y DROGAS: “tengo entendido que él estaba más activo de noche, llamaba a recepción de manera insistente para pedir alcohol todo el tiempo y preguntaba dónde podía conseguir drogas, más específicamente cocaína. Tengo entendido que durante la noche estos pedidos de alcohol y drogas por parte de Payne eran algo permanente pese a que se le explicaba con mucha amabilidad que el hotel solo brindaba servicios de venta de alcohol”.
PEDIDO DE COCAÍNA: “siempre se mantuvo hospedado solo, en la habitación nro. 310 ubicada en el tercer piso del hotel, en el contrafrente, con una ventana que da a un balcón, al restaurante Sacro. A veces subía su manager a la habitación, pero se quedaba pocos minutos. La única vez que ingresó alguien distinto a su manager a su habitación fue el día de su muerte. A Payne lo vi pocas veces salir y entrar del hotel, pero como dije, no se mostraba mucho, siempre lo vi con una actitud normal hasta hoy. Igualmente, ayer a la noche yo le escribí un mensaje de WhatsApp a su manager Roger por una situación incómoda que le sucedió a uno de bellboys del hotel con Payne: el lunes 14 del corriente mes y año a las 20.14 horas recibo un mensaje de Benítez diciéndome que había subido a la habitación de Payne con un plato de frutas (una amenidad, que es una especie de cortesía a la bienvenida de cada huésped de este tenor) y cuando este le abrió la puerta, lo hizo pasar y le preguntó si tenía cocaína, Benítez le respondió que no y ahí Payne comenzó a insultarlo. El empleado se retiró sin decirle nada, pero automáticamente me avisó a mi lo sucedido».

PROSTITUTAS: «ya en horas del mediodía, Payne se acercó a recepción solo y pidió por favor, que solicitáramos un taxi para que recoja a una persona en Esmeralda 933 y la lleve al hotel. Yo me acerque a la mesa donde estaba con su manager y le pregunte a nombre de quien y me dijo “Aldana Serrano”. El taxi que fue a buscar a la persona informó que no era una casa, que era un hotel. Yo le transmito esta información a Payne y me dijo “despreocupate” entonces desestimamos la recogida. Payne subió a su habitación, y el manager se retiró. Al rato, a las 12.00 horas aproximadamente llegó Aldana Serrano con una persona más, ambas exhibieron sus respectivos DNI, de lo cual sacamos fotocopia, por protocolo del hotel con todas las visitas. Se le dio aviso a Payne, el dio el ok y las chicas subieron a su habitación. […] Cuando subieron las chicas a su habitación, el hizo un pedido de USD 300 y alcohol a recepción: 4 botellas de whiskey Johnnie Walker Black Label y una botella de champagne Chandon que nosotros no teníamos y le dimos uno de otra marca. El alcohol le fue suministrado pero el dinero no porque no teníamos en caja. Toda esa situación yo se la avisé a su manager para que estuviese al tanto, como van a poder ver en el chat que aporté”.

CHAT DE WHATSAPP
- 16/10/24 12:31 – Jefe De Recepción: Sólo a modo informativo vinieron éstas chicas a su habitación. Se le subió un champagne y solicitó dos botellas de Johnny Walker.
- 16/10/24 12:36 – Roger Nores: Muchísimas gracias Esteban
LA DISCUSIÓN POR LOS 5 MIL DÓLARES: “a la hora aproximadamente las chicas bajaron junto con Payne, y antes de quedarse charlando con él en el lobby, me dijeron que él había roto el televisor de la habitación. Como dije, los tres se quedaron conversando en el lobby claramente por el pago de los servicios que ellas le brindaron en la habitación, que luego como a continuación relataré, confirmo que eran servicios sexuales. Como él no habla español ni las chicas hablaban inglés, él me pidió que les hiciera de traductor. Ahí las chicas me dicen que él les tenía que pagar, pero no me especificaron los motivos. Me dijeron que él les debía USD 5.000 pero a mi me pareció sospechosos porque él me había pedido anteriormente USD 300, además si bien no soy un experto en el tema me pareció un poco excesivo el valor de lo que pedían. Entonces les pregunté cuanto era lo que debían cobrar e insistieron en que eran USD 5000, incluso me mostraron desde uno de sus celulares las supuestas conversaciones que habían mantenido con Payne previamente donde acordaron ese monto por servicios sexuales; de hecho yo le saqué foto a ese chat”.
LAS FOTOS DEL CHAT DONDE ACUERDAN EL PAGO DE 5 MIL DÓLARES.


LA VIOLENCIA: «En ese momento me contacté nuevamente con Roger para contarle lo sucedido y él se acercó al hotel porque me dijo que el monto que pedían era una locura. Esto fue a las 15.44 horas, […]. A los pocos minutos, el supervisor junto con la gobernanta, nos avisaron que desde la habitación de Payne se escuchaban golpes de cosas y que estaba tirando y rompiendo cosas, porque había ruido a vidrio roto. Pero nadie intervino en su habitación, Justo en ese momento recibí un llamado de Roger y le comenté lo que estaba sucediendo y me dijo que se acercaba al hotel. A las 16.23 lo vuelvo a llamar pidiéndole que por favor se apurara porque los disturbios en la habitación de Payne no cesaban. 16.26 lo vuelvo a llamar por el mismo motivo, pero no me contesta».

DESCONTROL: «A las 16.27 lo vi bajar a recepción a Payne desde el ascensor con su computadora y una botella de whiskey en mano, situación que transmití a Roger a través de WhatsApp. Payne se quedó sentado en el lobby mirando a la nada, en un estado totalmente borracho, sin decir nada. A los tres minutos de eso, veo que Payne se levanta de uno de los sillones y junto con el bellboy de la tarde (José) lo acompañamos al ascensor y subimos con el hasta su habitación. Podía caminar por sus propios medios, pero se notaba que no estaba bien. Él no emitía ninguna palabra. La puerta de su habitación estaba cerrada y abrimos con una llave no recuerdo si mía o de José, no era la de Payne de eso estoy seguro, desconozco donde estaba su llave, capaz la tenía consigo, pero nunca atinó a sacarla. Cuando abrimos la puerta, lo acompañamos de atrás y se quedó dando vueltas. Ahí vi que estaba todo destruido, jarrones, lámparas, su ropa tirada por toda la habitación, las toallas manchadas con vino, botellas de vino rotas. No vi sangre, ni tampoco ningún tipo de droga, al menos en la entrada a la habitación, tampoco nada nada forzado, ni la puerta ni la ventana que hay en la habitación. La gente de limpieza se que vio al parecer un polvo blanco que parecía cocaína y papeles plateados en la habitación. Nos fuimos con José y Payne quedó allí dentro. No quedó nadie supervisando la puerta ni el pasillo de la habitación».
DESMAYOS PREVIOS A LA CAÍDA: «A las 16.50 lo llamó a Roger nuevamente -que hasta ese momento no había llegado al hotel- y pido por favor que fuese al hotel y dice que ahí iba. A los pocos minutos se abre la puerta del ascensor en recepción y veo a Payne dentro tirado en el piso inconsciente, entonces creo que con José, intentamos reincorporarlo y él sin decir nada abre los ojos, recupera la consciencia, se levanta, sale del ascensor y se sentó en una de las banquetas de la barra que da a la calle y a los pocos segundos se cae nuevamente y queda inconsciente en el suelo. En ese momento lo agarramos junto con José, Richard (la persona de eventos del hotel) y uno de los masajistas, lo llevamos al ascensor subimos con él a su habitación; cuando se abrió la puerta del ascensor en el tercer piso él recuperó la consciencia, se reincorpora y lo llevamos del brazo hasta su habitación por miedo a que se caiga, le abrimos la puerta de la habitación con una de nuestras llaves master. Entró solo, soltándose de nosotros, estaba muy pasado de alcohol. Lo acompañé hasta adentro pensando que se iba a acostar, pero se quedó nuevamente dando vueltas en el hotel. La habitación estaba en las mismas condiciones que mencioné anteriormente, no había otra persona.
LA MUERTE: «Payne se quedó allí, cerramos la puerta y los mismos que subimos nos quedamos del lado del pasillo para ver si escuchábamos algún ruido más. A los pocos minutos efectivamente escuchamos que nuevamente estaba rompiendo todo allí dentro, como que tiraba cosas o las pateaba cosas, no sé porque no podía ver, solamente escuchaba. Nos quedamos escuchando a ver si frenaba o como evolucionaba la situación y como podíamos intervenir. Los ruidos no frenaban entonces decidí bajar a recepción -creo que bajamos todos- y si mal no recuerdo llamé al 911 -o al SAME no me acuerdo bien estoy muy estresado por la situación- y les expliqué la situación, que tenía miedo de lo que pudiese llegar a pasar con esta persona por el estado en el que se encontraba.

«SE TIRÓ»: En ese momento vi que se acercó un patrullero al hotel y aparece uno de los chicos de venta y me dice “se tiró del balcón”, le pregunté si estaba vivo y me respondió que no sabía, que había caído en el patio del restaurant Sacro y había escuchado el ruido de la caída, pero nadie había visto la forma en la cual cayó. Mientras hablaba les dije lo que me había transmitido mi compañero. Ahí entró la policía y fueron donde él había caído. Llamé a Roger y le conté lo que había pasado y lo primero que me dijo fue “le tengo que avisar a su familia” pero él jamás volvió a aparecer en el hotel y después de ese llamado yo no volví a hablar con él”.
¿QUIENES ACCEDIERON A LA HABITACIÓN DE PAYNE DURANMTE SU ESTADÍA?: “solo tenía acceso y llave él. Casi todos los empleados tenemos una llave master con acceso a todas las habitaciones, pero por una cuestión de servicios. Durante el período en el cual estuvo hospedado solamente tuvo llave él de la habitación y los únicos invitados fueron Roger y las dos chicas que mencioné, a quienes él mismo oportunamente les franqueó el acceso”.


