Una discusión entre vecinos terminó con insultos, piedrazos, trompadas y un rifle de aire compromido. Todo ocurrió en Córdoba y Dorrego, en el barrio porteño de Colegiales.
La causa de la pelea: Un pitbull. Un joven de 28 años es apuntado por varios de sus vecinos por pasear al animal todos los días, a la mañana y a la noche, sin bozal ni correa.

El acusado, tras recibir insultos después de varios avisos, salió a la calle con un arma en la mano. Tras la llegada de la policía se constató que se trataba de un rifle de aire compromido.
«Me tenía que defender. Yo no le hago maldad a nadie que no se lo merezca. Eran cuatro contra uno y tenía mechete, así que yo no me iba a dejar lastimar y saqué el arma de aire comprimido» aseguró el dueño de la mascota a C5N.