En su alegato de cierre ante el Tribunal Oral en lo Criminal 2 marplatense, el fiscal Leandro Arévalo, pidió la pena de prisión perpetua para el principal acusado de abusar sexualmente a Lucía Pérez y asesinarla en octubre de 2016 en la ciudad de Mar del Plata, mientras que solicitó 20 años de cárcel para el hombre imputado como presunto cómplice.
Arévalo, consideró que quedó acreditada la responsabilidad penal de Matías Farías (29) y Juan Pablo Offidani (47) por el delito de "abuso sexual con acceso carnal agravado por resultar la muerte de la persona ofendida, por el suministro de estupefacientes y en el marco de un contexto de violencia de género, en concurso ideal con femicidio".
"ESTÁ PROBADA LA CULPABILIDAD"
El fiscal aseguró que Farías fue el autor del hecho, mientras que Offidani colaboró con él como "partícipe secundario".
Según señaló, se probó que ambos imputados pasaron a buscar a la menor en la camioneta de Offidani por la esquina de su casa en la mañana del 8 de octubre de 2016, "con la finalidad de abusar sexualmente de ella a sabiendas de su condición de menor de edad y de consumidora de sustancias estupefacientes".
LE SUMINISTRARON COCAÍNA Y MARIHUANA
En ese sentido, precisó que luego de trasladarla a la casa de Farías, en el barrio Alfar, y quedar a solas con él, el principal acusado "le suministró cantidades indeterminadas" de cocaína y marihuana, para "lograr quebrantar su voluntad", en "un indudable contexto de violencia de género" y luego "la accedió en reiteradas oportunidades".
El fiscal sostuvo que "dicho abuso fue brusco y violento", de acuerdo a una serie de "lesiones constatadas en el cuerpo" de la adolescente.
UNA VÍCTIMA VULNERABLE
Arévalo puso el foco en la situación de vulnerabilidad de la víctima, por su condición de menor, de mujer y de consumidora, que "no está en igualdad de condiciones con aquel que se dedica a la venta de estupefacientes", con quien además mantenía "una deuda dineraria" por la compra previa de drogas.
En cuanto al rol de Offidani, dijo que tenía una foto de Lucía en su celular, que "ni era remís ni nada que se le parezca" de Farías, sino que "era socio", y recordó en ese sentido que junto a él fue condenado en un primer juicio por el hecho, por la tenencia de drogas con fines de venta.
"IBAN A BUSCAR NENAS"
De acuerdo a la instrucción del caso, Lucía había conocido a ambos un día antes de su muerte, cuando se acercaron a la Escuela Media 3 local a venderle un cigarrillo de marihuana.
Arévalo aseguró al respecto que los imputados "no iban a buscar clientes" a las inmediaciones del colegio, sino que "iban a buscar nenas", con las cuales trataban de "tener sexo por la vía que fuera posible".
EL FISCAL PIDIÓ PERDÓN
En la sala de audiencias estuvieron los padres de Lucía, Marta Montero y Guillermo Pérez, acompañados entre otros por el papá de Natalia Melmann. Ante ellos, en su alegato, el fiscal pidió "disculpas en nombre de Ministerio Público Fiscal" por las "falencias" de la instrucción inicial del caso, a cargo de la fiscal María Isabel Sánchez, que "derivaron en un perjuicio para las pretensiones de la familia de la víctima".
Entre ellas, subrayó que la fiscal no estuvo en las primeras actuaciones, lo que "derivó en una pérdida de elementos de prueba" y que tras el traslado del cuerpo de Lucía "dejaron ir a Farías sin ningún tipo de recaudo tendiente a evitar la pérdida de pruebas".