Cuando los efectivos detuvieron la marcha del auto, nunca imaginaron lo que iban a encontrar. Los dos ocupantes llevaban en la parte trasera cuatro terneros vivos. Para ello, habían reclinado el asiento trasero.
Según información de diariochaco.com, cuando los uniformados solicitaron documentación y certificados para la transferencia de ganado, los hombres no tenían ningún papel y tampoco pudieron justificar la procedencia de los animales.
El operativo terminó con el secuestro de los animales y los dos hombres demorados.
Minutos después, el peón de un campo cercano se presentó para denunciar el robo de los terneros y ahora los ladrones deberán enfrentar una causa por abigeato.