Finalmente una pericia balística concluyó que el arma con la que fue asesinado el matrimonio Del Río en agosto pasado en su casona del partido bonaerense de Vicente López es una pistola calibre 9 milímetros secuestrada en la caja fuerte de la casa del country San Diego de la localidad de Moreno donde las víctimas pasaban el fin de semana.
Se trata de una Bersa modelo Mini Thunder hallada el mismo día en el que se encontraron los cadáveres de José Enrique Del Rio (75) y María Mercedes Alonso (72), en la casa que el matrimonio posee en ese barrio cerrado.
ACCESO A LA VIVIENDA
Ahora, los fiscales intentan establecer si Martín Del Rio, el hijo de las víctimas detenido como presunto autor de un doble parricidio, tuvo acceso a esa vivienda en las horas posteriores al hecho cometido el día anterior.
Para los fiscales que investigan el caso, Martín Del Río fue quien extrajo el arma de la caja de seguridad, para, luego de haber ejecutado el doble parricidio, regresar nuevamente al Barrio San Diego y colocar la pistola homicida en el mismo sector, con el fin de "ocultar sus pasos".
"Tal hallazgo en las particulares condiciones descriptas no hace más que reafirmar la existencia de un plan criminal delicadamente planificado por el imputado Martín del Río para ejecutar el hecho criminal y evitar ser señalado como autor del mismo", diejeron fuentes judiciales.
ÚNICO DETENDO
En base a prueba fílmica, tecnológica y testimonial recopilada por la fiscalía, el juez Costa dictó la prisión preventiva de Del Rio como autor de un "doble homicidio calificado por alevosía, por el vínculo, por el uso de arma de fuego y por ser criminis causa" (matar para lograr la impunidad), delito que prevé como única pena la prisión perpetua.
Para los fiscales, el móvil fue económico y está vinculado a la frustrada operación inmobiliaria por la cual las víctimas pensaban que ese mismo día iban a mudarse a un lujoso departamento del barrio porteño de Núñez, valuado en más de un millón y medio de dólares, y que Del Rio hijo nunca pudo concretar.