La investigación comenzó hace un año con tareas de campo y seguimiento a miembros de la banda liderada por el condenado jefe narco Esteban Lindor Alvarado, quien se encuentra actualmente detenido en el penal federal de Ezeiza.
El eje de la causa es el robo de vehículos de alta gama y la metodología consistía en recibir los coches robados, cambiarle la documentación y dejarlos «enfriar».

Recordemos que en la jerga, «enfriar» significa esconder el vehículo durante un tiempo hasta que la policía, las aseguradoras o los sistemas de rastreo satelital lo den por perdido.
Una vez realizada la documentación correspondiente y pasado el tiempo necesario, se introducían en el mercado nuevamente.
La Policía descubrió que algunos hechos eran por encargo y que también traían autos desde Córdoba.
Los vehículos se ocultaban en galpones y cocheras que fueron allanadas.

Uno de los operativos se realizó en la calle Biedma del Barrio Alvear de Rosario, donde vivía un hombre que era buscado por ser testaferro de Alvarado.
Durante otro allanamiento, en la calle Fournier, secuestraron 2 escopetas, 2 revólveres calibre 32 mm, gran cantidad de balas, cartuchos, dinero y celulares.

En total, siete personas quedaron detenidas y también secuestraron USD 140.000, más de $ 6.000.000, 40 celulares, dos autos, dos motos, cuatro armas de fuego, una réplica de pistola, un rifle de aire comprimido y varias municiones de distintos calibres.
El operativo fue realizado por la Brigada de Inteligencia de la Dirección General de Investigaciones de la Policía de Santa Fe, con la colaboración de los grupos de Irrupción TOE, GOT, GIRI y GTM.